Arquitectos nazarenos: hoy hablamos de José María Boza Mejías (y III)

0
José María Boza Mejías

José María es un autor postmoderno para mi con mucha influencia del racionalismo

Siguiendo con la vida laboral de nuestro personaje, y metiéndonos más en en lenguaje simbólico de esta singular conjunción de cuatro monumentos que forman la torre, la hacienda de Montefrío, la Capilla- muchas veces me gusta decirle ermita aunque comprendo que no se encuentra ya en despoblado- de Santa Ana, por razones obvias por el patronato de la Santa el más importante- y la Peña Sevillista. Y eso por no contar la Capilla de la Virgen del Carmen, una de las dos grandes devociones marianas de la ciudad. Cuando se estudia la alineación de la Peña Sevillista, y se acepta como el mejor el que establece como fondo de la perspectiva del espacio entre la torre y la peña al que marca como perspectiva la Capilla patronal, hay un diálogo entre el edificio muy antiguo de Dos Hermanas que es la ermita, la torre del Olivar y la joven Peña Sevillista del siglo XXI. Ese diálogo se ve reforzado por un pequeño balcón que mira desde la Torre del Olivar al edificio de la Peña y, a su vez, en este desde una terraza volada mira a la Capilla de Santa Ana. Todo ello está hecho a posta. Se remodela también la entrada a la capilla. José María Boza diseña la verja, la escalera y toda el sistema de evacuación de agua ya que por su nivel necesita un sistema especial de evacuación de agua, sin necesidad de motor.

Actualmente, nuestro arquitecto está metido en una obra de envergadura, un edificio de noventa y dos viviendas para familias del barrio de Quintillo. Se trata de construir tres bloques con el número de viviendas que ya dije anteriormente.

Siguiendo la tarea constructiva de José María Boza Mejías, y tengo que decir que proyectó una casa para su prima Francisca Boza Mejías en la calle Lope de Vega, además de viviendas en Puerto Serrano y Alcalá de Guadaíra.

Y yo, la verdad, es que veo mucho en su estilo de la Arquitectura racionalista aunque él hable sobre todo de arquitecto postmoderno. Su propia casa, en la urbanización de La Motilla, es un edificio postmoderno, para mi gusto muy bonita pero no soy nada de neutral porque, a mí, me gusta mucho la arquitectura moderna.

Otra obra muy significativa, es el Centro Cultural La Almona, obra en coautoría con José Ignacio Crespo Rodríguez. Y sobre todo destaca la consolidación y restauración del símbolo de nuestro pueblo -quitando los religiosos- la Torre de los Herberos. Se han consolidado las caras exteriores y quedan los interiores.

Con ellos trabajan el arqueólogo José María González Jiménez y la restauradora María Isabel Baceiredo.

A finales del año y principios del que viene quiere hacer la obra de consolidación. Se propone poner en valor la torre -a la que los nazarenos, yo el primero, no le echamos la cuenta que debiéramos- y poner también en valor el yacimiento de Orippo. Es un deseo de nuestro arquitecto, que los colectivos y ciudadanos particulares visiten el yacimiento. Sería una visita que empezaría por la torre y continuaría por el importante yacimiento.

Pero ya voy a centrarme en la familia y en el mundo de las mentalidades de nuestro protagonista. El mayor de sus hermanos es él José María de Jesús, sigue Concepción Eva, amiga de mi juventud; Francisco Javier de la Vera-Cruz y la Asunción; Jesús y Rocío.

José María casó con una médico, la doctora -con el doctorado incluido- Rosario Varela López, anestesióloga. Trabajaba en el Hospital Duque del Infantado como Jefe de Cirugía Ambulatoria. Lamentablemente, su esposa murió joven y ello ha dejado una huella en José María que se transparenta en su personalidad. Una obra importante de la finada es que ella y las doctoras Reyes Vázquez y Rosario Picón fueron las primeras en crear el equipo del epidural en el Hospital Virgen del Rocío. A partir de eso las mujeres parieron sin dolor en Sevilla. El doctorado de la esposa fue con la tesis ‘Convulsiones febriles en la Infancia’. Los directores fueron el Doctor Nieto Guerrero y Casto Estefanía Gallardo.

Nuestro protagonista tiene dos hijos: José María, que ha terminado un curso de Postgrado de promoción a la Vida Activa de personas con minusvalía psíquica impartido en la Universidad Pablo de Olavide. Su hijo es un consumado atleta. En Abu Dhabi, obtuvo dos medallas de oro en tenis individual y doble en los Specials Olimpics Games World.

Por otro lado tiene una hija, Elena María, especialista en Nutrición Humana y Estética que ha estudiado en la misma universidad nazarena, en la Pablo de Olavide.

En cuanto al mundo de las mentalidades, de los gustos, de las devociones, a los que, como todo el mundo sabe, yo doy tanto valor, a nuestro protagonista le gusta navegar en vela, montar en moto y volar en globo lo que no casa, desde luego, con la imagen pacífica que da. Son, desde luego, deportes de bastante riesgo. También le gusta, en lo que coincide conmigo, viajar. También coincide conmigo en que le gusta leer e ir al cine. En cuanto a sus gustos musicales le gusta la música clásica y en general no estridente. Entre sus grupos preferidos se encuentran Dire Straits y Mark Knoffler, ambos de Rock. Yo diría que José María es un hombre del Renacimiento con variedad de gustos y amor hacia las Bellas Artes.

Un rasgo que me ha llamado la atención de sus preciosa casa, aparte de su estilo arquitectónico, fiel reflejo de la manera de trabajar y la personalidad del autor, es la gran cantidad de detalles que decoran sus estanterías y paredes. Y se me va a permitir una pequeña digresión. Yo, en la casa de José María, al que conozco desde que éramos adolescentes, me encontraba como en mi casa no sólo por la hermosura de la mansión sino por la cantidad de recuerdos que ornan la casa. Yo me transportaba a la mía, también de recia arquitectura y plagada de libros y de recuerdos de todo tipo. Es, quizás por ello, por lo que me ha sido más fácil escribir estos artículos.

Y, por último, quiero adentrarme en el mundo religioso de nuestro personaje. Es creyente como la mayoría de los que aparecen en estas páginas -con sonados ateos- y es tan ortodoxo que cree en Jesús en su doble naturaleza divina y humana. Su mucha cultura, al contrario que a muchos otros, puede verse que no lo ha alejado del cristianismo. Sin embargo, no está vinculado a ninguna hermandad.

Y acabo por ahora estos artículos dedicados a los arquitectos. En ellos he retratado un grupo de amigos míos que con su trabajo están dejando muy alto el Arte de la Arquitectura en Dos Hermanas. Por supuesto, dejo el campo abierto para hablar de otros profesionales de este Arte.

Print Friendly, PDF & Email